Inicio del partido

0'

Basora

37'

César

44'

Descanso

45'

Vicente Seguí

48'

Basora

49'

Silvestre IgoaAsist: Vicente Seguí

72'

Final del partido

90'

Los penúltimos actos han concluido, por cierto sin sopresa alguna y sin resultados asombrosos. Los pronósticos están de enhorabuena. Habíamos dicho que el Atlético bilbaíno no necesitaría desarrollar un gran esfuerzo para ampliar la disitanca victoriosa que ya marcó en Sarria y, efectivamente, ha logrado la goleada de la media docena. Por otra parte, el Barcelona, vencedor del Valencia, no consiguió siquiera, alcanzar la distancia de los dos goles, que habría forzado el partido de desempate.

A distancia, los resultados parecen justos, y los finalistas representan, en el momento actual, las dos mejores entidades futbolísticas en su mejor momento. El Atlético d Bilbao, superado el difícil plato que atravesó durante la Liga, se ha repuesto oportunamente, con juego y fortaleza física, que le han llevado a la final con seguridad, sin contratiempos ni dificultades. El Valencia, grupo de veteranos que otra vez ha alcanzado plenitud de forma, tiene, además de la calidad indiscutible de los hombres, la experiencia quede prestan sus "expertos" y sus probadas características "coperas". En la contienda final, que se jugará el próximo domingo en Chamartin, los futbolistas de Mestalla frente a los de San Mames deben interpretar uno de los episodios más brillantes y de más emoción de la Copa del Generalísimo. Con un vencedor dificilísimo de anticipar, porque a la hora actual los dos grandes clubs "históricos" tienen semejanza de probabilidades, por paralelismo de los magníficos conjuntos.

El comienzo del encuentro jugado en Les Corts fue de gran emoción. A los treinta y cinco minutos se lesionó Asensi al caer en mala posición contra una de las vallas laterales del terreno de juego, debiendo abandonar el terreno de juego durante unos minutos. Cuando se llevaban treinta y siete minutos de juego, el Barcelona obtuvo el primer tanto, como consecuencia de una magnífica combinación, en la que intervinieron Seguer, Marco Aurelio y Nicolau, y que coronó Basora con un tiro por bajo y esquinado, batiendo a Eizaguirre.

A los cuarenta minutos, reapareció Asensí. Faltando un minuto para el descanso, un centro de Nicolau lo aprovechó César para rematar de cabeza, logrando el segundo tanto. En la segunda parte, a los tres minutos, Igoa aprovechó una salida de Velasco para hacerse con el balón, bombeándolo sobre la portería catalana. Él balón se introdujo rozando el travesaño, a pesar del esfuerzo de Curta, que, con la cabeza intentó desviar la trayectoria de la pelota.

El Barcelona, lejos de desmoralizarse, reaccionó nuevamente en forma formidable, y al minuto, Basora, después de recoger un preciso servicio de Marco Aurelio, se internó, rematando y logrando el tercer tanto. Pareció que, a partir de este momento, el Barcelona iba a conseguir la eliminatoria, ya que presionó insistentemente, obligando a Eizaguirre a intervenir con frecuencia, pero los valencianistas, actuando con gran serenidad, supieron aprovechar una indecisión de los defensores locales para llevar el balón ante el área catalana, Seguí, después de internarse, logró el segundo tanto.

Al final, un remate de Marco Aurelio estuvo a punto de batir a Eizaguirre, y poco más tarde, un centro magnífico de Basora fue rematado en forma impresionante por Nicolau, a dos metros de la portería, pero Eizaguirre, en Valiente intervención, logró neutralizar la jugada y anular la última posibilidad barcelonista. Hay que calificar la actuación del colegiado guipuzcoano, Señor Rivero como buena e imparcial.