Ficha de partido: 13.02.1944: Atlético de Madrid 4 - 2 Valencia CF

Ficha de partido

At. Madrid
At. Madrid
4 - 2
Valencia CF
Valencia CF

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Adrover
20'
Germán
33'
Descanso
45'
Campos
55'
Campos
57'
Campos
69'
Juan Ramón Santiago
78'
Final del partido
90'

Estadio



Nombre: Metropolitano
Aforo: 25.000 espectadores
Ubicación: Madrid (Madrid) 
Inauguración: 13/05/1923 (Demolido en 1966)

Rival: At. Madrid

Records vs At. Madrid

Máximo goleador: Mundo Suárez (16 goles)
Goleador rival: Luis Aragonés (12 goles)
Mayor victoria: 9 - 1 (13.09.1936)
Mayor derrota: 0 - 5 (10.11.1985)
Más repetido: 1-1 (22 veces)

Crónica

Los verdaderos aficionados al fútbol, que nunca nos atreveremos a cifrar, ni siguiera por aproximación, resultaron defraudados, una vez más, en la última jornada. Partido de calidad rotundamente pobre, el viento a veces huracanado y el deplorable estado del terreno influyeron no poco en el desarrollo de un juego desordenado e incoherente. Dominó más el Atlético Aviación, que aprovechó felizmente las ocasiones para marcar, frente a un Valencia desconcertante y desconcertado, que no justificó en ningún instante la excélente clasificación. La victoria resultó, por tanto, para el menos torpe, que fue, además, el más afortunado.

Si el equipo valenciano tiene el juego que parece deducirse de la posición que ha alcanzado, es más increíble su fracaso. Porque precisamiente cuando las circunstancias difíciles lo exigen, hay que demostrar los recursos y las calidades. El ventarrón que impuso su dominio toda la tarde, aconsejaba un juego por bajo, que el Valencia no intentó sino durante los diez minutos últimos de la primera parte, y el Atlético, que jugó y dominó a favor de viento todo ese plazo, esgrimió, como línea decisiva para atenazar al rival, la de sus tres medios, en mejor forma que nunca. De ellos fue entonces y luego el éxito, que, con delanteros más acertados, habría convertido el magnifico triunfo en amplio descalabro del Valencia.

La prolongada falta de lluvias y el viento durísimo perturbaron el espectáculo. Cuando el aire sopla con tal violencia, se reconocen los equipos mejores. El Valencia, contra el aire, no logró llevar los balones a ras del suelo, y el Atlético, en la primera parte, en pleno dominio, acertó con la mejor estrategia. Cambiadas los terrenos, el Valencia no lo hizo mejor, y el Aviación tuvo la fortuna de marcar pronto y adelantarse tanto en el marcador, que el contrarío se desmoronó. Tan sólo tras el empate, los valencianos dieron unos minutos sensación de equipo, que al encajar el segundo gol se frustró por completo. El terreno está en malas condiciones. Duro y desigual, las heladas le hacen, por algunos lugares, sobre todo la faja próxima y paralela a la tribuna, realmente impracticable.

Desde el comienzo, la impetuosa decisión de los medios locales, aprovechando la velocidad del viento, impuso la tónica del partido. Con cierta serenidad de la que los extríenros rojiblancos son incapaces, habrían marcado casi al principio. Luego fue una especie de entrenamiento de ataque y defensa, sobrealimentados los atacantes con servicios constantes de los medios. Así, a los veinte minutos, era un avance de Campos, el pase al extremo permitió a Adrover ganar por velocidad y por la indecisión de Eizaguirre el camino del marco, y el tanto fue magnífico, aunque para comenzar a recelar de las dotes del guardarredes.

Al filo de la media hora, en una de las desorganizadas escapatorias del Valencia, la indecisión de la defensa local permitió a Mundo un remate de cabeza, que Hernández coronó irremediablemente. Y los minutos siguientes fueron los del mejor juego, porque el Valencia acertó a urdir un excelente juego combinado, y los medios rojiblancos tuvieron que hacer grandes esfuerzos para contener el empuje. Pero duró poco, porque en los últimos instantes atacan los "aviadores", y Ameztoy, excelente conductor de la línea, bordó una jugada para disparar fuerte sobre del marco, donde el portero iniciaba una salida absurda, y Campos, en dificilísima postura, alcanzó la pelota, que, desviada, iba al fondo de la red.

La segunda parte, con fuerte viento favorable al Valencia, fue iniciada con ataque decidido de los atléticos, y a los cinco minutos llegó el tercer sol, de disparo formidable de Campos, que dio en el larguero, entró y volvió a salir, ayudado tardíamente por el portero. Y aunque las reacciones valencianas parecían peligrosas, en el encuentro con los medios quedaron desarticuladas. Hasta que diez minutos más tarde un pase de Machín fue empalmado, de miodo soberbio, por Campos, para llevar el cuarto gol al marcador.

Desarbolado el Valencia, el Atlético jugó a placer y bordó varias fases brillantes, hasta que en un despeje del defensa Juan Ramón, la pelota, empujada por el viento, halló descolocado al portero y fue el segundo gol del Valencia. Después, forcejeos, resignación de los vencidos y nada más subrayable.

Los tres medios del Atlético, como un bloque, una línea y una única gran figura, y en el ataque, Amestoy, mejor que los demás, valientes y ofensivos. Del Valencia, fracaso de la línea de medios, torpeza del tríko defensivo y atisbos de jugadores en los que tantas veces demostraron, serlo: Mundo, Amadeo, Epi y Gorostiza. Mas, en conjunto, un partido que defrauda, un Valencia descolorido y un Atlético fuerte, recuperado y eficaz, que puede dar sorpresas. Sobre, todo si el Barcelona y este mismo Valencia se lo permiten.